Dicen por ahí que no siesta, no fiesta…o bueno lo digo yo! 🤣
Todas pasamos por etapas de siestas cortas con nuestros bebés y la verdad es que es frustrante, no solo porque no podemos tomar un descanso nosotras, sino porque la mayoría del tiempo nos damos cuenta que ellos tampoco descansaron bien y están más irritables el resto del día😞.
Hablemos entonces de las siestas cortas y cómo arreglarlas. Como siempre digo, el sueño tiene muchas piezas y es importante que todas estén en orden para lograr un buen descanso. Después de trabajar con muchas familias en el sueño de sus hijos, me he dado cuenta que en la mayoría de los casos, siempre hay algo por mejorar para alargar las siestas!
¿Qué es una siesta corta?
Una siesta corta es una siesta que dura entre 30-40 minutos, es decir, un ciclo de sueño.
En recién nacidos (bebés menores a 5 meses), es normal ver siestas cortas ya que su sueño todavía está madurando. Si te das cuenta leyendo este artículo que hay elementos por mejorar, adelante, pero no te estreses si tienes un recién nacido con siestas cortas, es normal y lo mejor que puedes hacer es ayudarle a extender las siestas para enfocarte en mejorar la noche con tu bebé de 0 a 4 meses.
Cuando los bebés toman 3 siestas (5-7 meses aproximadamente), también es normal tener 2 siestas largas (más de una hora) y una más corta (30-40 minutos).
Sin embargo, cuando un bebé toma 2 o 1 siesta al día, lo ideal es que esta tenga más de una hora de duración.
¿Por qué ocurren?
Las siestas cortas pueden ocurrir por muchas razones en un bebé o toddler, miremos los 5 elementos más importantes de una buena siesta y lo que puedes revisar para mejorar las siestas:
Revisa el ambiente
A medida que los bebés crecen, cada vez su ambiente se vuelve más interesante y estimulante, y dormir se vuelve aburrido. Si un bebé se levanta de un ciclo de sueño de su siesta y ve muchas cosas chéveres a su alrededor, como el móvil de su cuna, el juguete que le gusta, va a ser más difícil que se vuelva a dormir nuevamente. Recomiendo mucha oscuridad para las siestas, al igual que una máquina de sonido blanco y una temperatura adecuada en la habitación.
¿Qué tan oscuro? Lo más oscuro posible. No te preocupes, esto no va a hacer que tu bebé confunda día y noche.
Organiza los horarios de alimentación y descanso
Dependiendo de las horas de su toma, es posible que un bebé se despierte por hambre de la siesta (al igual que la noche). Aunque mi recomendación es evitar la asociación de comer para dormir, si un bebé no está teniendo tomas completas en el día, o tiene ventanas de vigilia largas, dar una toma cerca al inicio de la siesta puede ayudar a evitar que el bebé se despierte por hambre de la siesta muy pronto.
Por ejemplo, si un bebé de 9 meses despertó a las 6 am y tuvo una toma de leche, y su siesta es a las 9 am, vale la pena ofrecer una toma antes de la siesta nuevamente para evitar que se levante pronto de la siesta con hambre.
Evita el sobrecansancio
El enemigo número 1 del sueño – yo sé que siempre lo estoy repitiendo pero es verdad. Cuando un niño llega muy cansado a la hora de dormir, esto usualmente causa más lágrimas y resistencia para dormir y no permite que tengan un descanso placentero.
Por ejemplo, si la ventana apropiada de vigilia para un bebé de 8 meses es de 3 horas aproximadamente, si este bebé pasa 4 horas despierto entre una siesta y la otra, es posible que llegue muy cansado a la segunda siesta.
Poca presión de sueño
Y al contrario de la razón anterior, poca presión de sueño también puede causar siestas muy cortas. Si un bebé no ha estado despierto por suficiente tiempo, es posible que se duerma con facilidad pero que despierte de su siesta corta completamente relajado, ya que no tenía suficiente “presión de sueño” o cansancio acumulado para dormir más tiempo.
Por ejemplo, si un bebé de 10 meses tolera 3-4 horas despierto, pero se le ofrece una siesta a las 2 horas de haber despertado, puede suceder que duerma nada más 45 minutos ya que no tenía suficiente presión de sueño para descansar más (con lo que durmió fue suficiente).
Además de estar pendiente del tiempo, asegúrate de que tu bebé tenga actividades que estimulen cuerpo y mente. Si un bebé está durante toda la ventana despierto en un carrier, en una silla mecedora, o en el coche sin moverse mucho, es probable que no haya gastado tanta energía como para necesitar una buena siesta.
Para revisar mis recomendaciones de ventanas de vigilia, te recomiendo descargar mi tabla de sueño GRATIS aquí.
Concilia el sueño con ayuda
La última razón y usualmente la más común: tu bebé se duerme con ayuda al momento de iniciar la siesta. Esto no tiene nada de malo, dormir a un bebé en una mecedora es delicioso, pero hacerlo puede causar que a tu bebé se le dificulte volver a dormir cuando ya haya cumplido con un ciclo de sueño. Cuando un niño aprende a dormirse por sí solo al inicio de una siesta, usualmente se ven periodos de sueño más largos en siestas y noches.
Si buscas mejorar las siestas de tu bebé, empieza por mejorar los primeros elementos que mencioné. Si al estar todo en su lugar, todavía te encuentras con siestas cortas, y tu bebé se duerme con ayuda de un cuidador, te recomiendo empezar a enseñarle a tu bebé a conciliar el sueño por sí solo (recuerda que hay muchas formas de hacer esto de manera progresiva).
Las siestas son supremamente importantes para un buen descanso nocturno. Si tu bebé no toma buenas siestas, te recomiendo siempre complementar con una hora de dormir temprana para que tu bebé recuperé el sueño en la noche.
